__Por tus ojos
A
José
Hoy,
miro por tus ojos.
Quisiera
trasplantarte mi retina
donde
tengo grabados los recuerdos.
Desearía
sangrar por tus heridas
y
que fueran mis lágrimas aquellas
que
por tus ojos limpios se derramen,
y
que fuera mi piel la escarnecida,
la
desollada piel de tu castigo.
Quisiera
ser el cuerpo que arrastrase
tus
pesadas cadenas.
En
los malos caminos
tu
báculo y tus pies,
y
dejarte, al final, una esperanza,
detrás
de la sonrisa luminosa
de
un padre que será siempre un amigo,
un
consejo, tal vez afortunado,
sobre
una evocadora y triste mesa.
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