__¡Tic...tac...!
¡Tic...tac...!
¡Tic...tac...! ¡Tic...tac...!
¡Tic...tac...!
Ni siquiera un metálico deseo.
Ya, el sol ha salido.
Del trabajo al descanso.
El sol se ha consumido.
¡Tic...tac...! ¡Tic...tac...! ¡Tic...tac...!
Del silencio en la noche
al pulular del día.
Ya, el sol ha nacido
sin palabras de amor.
El sol ha sucumbido
muriendo entre engranajes.
¡Tic...tac...! ¡Tic... tac...! ¡Tic...tac...!
Hoy, el reloj se ha caído
y el mundo se rompió el corazón.
Intemporal ausencia.
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